Algunos grupos de investigación y empresas de la nanotecnología, en nuestro país y el mundo, buscan y ofrecen soluciones a problemas relacionados con la remediación del medio ambiente y el cuidado de los recursos naturales. Cada vez son más frecuentes las líneas de trabajo orientadas al desarrollo de energías alternativas y materiales amigables con el ecosistema y otras dirigidas al reacondicionamiento de recursos dañados o contaminados por el uso, como es el caso del agua. Hoy es el Día Mundial del Agua y desde la Fundación Argentina de Nanotecnología aprovechamos para contarte sobre algunos de los proyectos relacionados con su cuidado y reutilización.
Una de las iniciativas más interesantes es liderada por la doctora Marta Litter, investigadora del Instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental de la UNSAM y la Comisión Nacional de Energía Atómica, que consiste en la remoción de arsénico, plomo y uranio mediante procesos de oxidación avanzada. Para su desarrollo se vale de tecnologías poco costosas que aprovechan elementos naturales como la luz solar, o abundantes como el hierro cerovalente nanoparticulado que se encuentra en clavos, tachuelas, tornillos, alambre y limaduras de acero. También recurre al versátil dióxido de titanio y a las modernas nanopartículas de hierro que pueden ser aplicadas por medio de una perforación e inyectadas con una corriente de nitrógeno para invadir el suelo – una vez hecho esto, los contaminantes se adhieren fuertemente al material -. Con estos elementos, Litter idea exitosos métodos para descontaminar muestras de agua que, luego de pasar las cruciales pruebas de laboratorio, están listos para ser implementados en pruebas de campo.
Por otro lado, el Programa de Inversión en Emprendimientos de la FAN, que busca facilitar y acelerar la puesta en marcha de proyectos innovadores, tiene dos proyectos relacionados con el agua: uno de ellos, llevado a cabo por el Instituto de Investigación en Ciencia y Tecnología de los Materiales (INTEMA – UNMdP – CONICET) que tiene como objetivo el diseño y construcción de un equipo piloto para el tratamiento de aguas residuales con nanoarcillas magnéticas y, otro, de la empresa Nanotek S.A., que busca la nano-remediación de agua contaminada con arsénico para consumo humano.
El Pre-semilla MGB (Magnetism Beats Gravity) del INTEMA que propone el desarrollo de un proceso para remover contaminantes por medio de nanoarcillas modificadas magnéticamente, se presenta como una alternativa económica, eficiente y con bajo requerimiento de espacio para el tratamiento de efluentes de industrias como la textil, la alimenticia, la química o la metalmecánica. Las nanoarcillas, que tienen una probada eficiencia en la remoción de colorantes químicos, metales y diversos compuestos orgánicos, simplifican y aceleran enormemente el proceso de separación de contaminantes, permitiendo su eliminación por medios magnéticos.
El otro proyecto, propuesto por Nanotek S.A. plantea la utilización de nanopartículas de hierro cerovalentes – similar al mencionado anteriormente – en napas subterráneas para la absorción de arsénico. La presencia de esta sustancia es un problema que afecta a una gran parte del territorio nacional -16 provincias, 435.000 km2 y 2,5 millones de habitantes- e implica una erogación de 14 millones de dólares para el presupuesto del área de salud pública, causada por el Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico, enfermedad cancerígena que afecta a los huesos y la epidermis de los consumidores de aguas contaminadas. Este proceso de mitigación de arsénico en aguas de napas, utiliza luz UV para acelerar y catalizar la reacción, basada en la atracción magnética de las nanopartículas que se encargan de absorber el contaminante.
La ONU afirma que la mitad de los trabajadores (1500 millones) del mundo se desenvuelven en sectores relacionados con el agua y para eliminar los problemas relacionados con ella, se debe trabajar con un espíritu de cooperación urgente, con mente abierta a las nuevas ideas y la innovación y, dispuestos a compartir las soluciones que todos necesitamos para un futuro sostenible. El Día Mundial del Agua fue establecido el 22 de marzo de 1992 en una Conferencia de la ONU para el Medio Ambiente y el Desarrollo realizada en Río de Janeiro, Brasil. La Fundación Argentina de Nanotecnología tiene el compromiso de contribuir con estos objetivos.